Las
fumadoras embarazadas encienden una media de 13 cigarrillos al día. Si se
suman, a lo largo del embarazo se expone al bebé a las sustancias
nocivas de 3.640 cigarrillos. Al fumar un cigarrillo estás inhalando más de
4.700 sustancias nocivas.
Cuando la embarazada deja de fumar,
la recompensa se siente al poco tiempo.
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El bebé también siente
los efectos positivos de inmediato, ya que recibe la cantidad apropiada de
oxígeno y alimento y su desarrollo no se ve obstaculizado por la nicotina u
otros agentes químicos.
El consumo
de tabaco afecta al crecimiento del bebé. Con cada cigarrillo el riego
sanguíneo a través de la placenta disminuye durante unos 15 minutos, lo que
aumenta el número de latidos fetales. El monóxido de carbono que se inhala con el
humo reduce un 40 por ciento el oxígeno que recibe el feto. Esto afecta a su
crecimiento: cuanto más fume la madre, menos crecerá el pequeño; por ello, los
hijos de mujeres fumadoras pesan una media de 200 gramos menos al nacer.
Sin embargo,
esto no augura un parto más fácil. Cuando una mujer es fumadora son
frecuentes las complicaciones en el parto.
Dejar de
fumar también protege a tu hijo de un parto
prematuro. Uno de cada siete hijos de madre fumadora llega al mundo
antes de tiempo. De hecho, el 15 por ciento de los partos prematuros se deben
al consumo de tabaco durante el embarazo.
Fumar
también incrementa el riesgo de hemorragia y aborto. Además, hace que la
embarazada se note más cansada y practique menos deporte.
Además,
dejar de fumar disminuye el riesgo de la muerte súbita
del lactante, de abortos espontáneos y el riesgo de hemorragia. Una
embarazada que fuma más de 20 cigarrillos al día corre el doble de riesgo de
que el bebé fallezca por un desprendimiento de la placenta que una no fumadora.
Dejar de
fumar evita problemas de pulmón. El humo del tabaco dificulta el desarrollo de
los pulmones del feto. Sus funciones disminuyen cuando la mamá fuma, un
problema que persiste después del nacimiento.
Los niños
expuestos al tabaco sufren más enfermedades agudas y crónicas de las vías
respiratorias, asma, alergias y otitis que los niños de padres no fumadores.
En cuanto a
las malformaciones congénitas, estudios recientes han demostrado que fumar
durante el embarazo incrementa el riesgo de labio leporino y paladar hendido en
el bebé cuando la madre tiene una predisposición genética a trasmitirlo.
Además, los hijos de madres que fumaron durante el embarazo tienen un riesgo
mayor de padecer en el futuro ciertos tipos de cáncer, como los de riñones y
vejiga.
Dejar de
fumar reduce las posibilidades de que el niño desarrolle adicciones en el
futuro. Los niños de madres fumadoras tienen más receptores de nicotina en el
cerebro, lo que les convierte en más susceptibles de ser fumadores cuando
llegan a la adolescencia y prueban el tabaco por curiosidad.
Dejar de
fumar previene daños celulares. Muchas sustancias nocivas del humo del tabaco
atraviesan la placenta y llegan al riego sanguíneo del bebé, como el monóxido
de carbono, que bloquea el oxígeno que transporta la sangre y daña su
suministro. También previene contra las alergias, ya que el tabaco las fomenta,
y afecta a varias generaciones. Los nietos de abuelas fumadoras tienen más
riesgo de sufrir una alergia que los niños que no estuvieron sometidos a esos
malos humos.
Dentro del útero materno
el bebé puede acostumbrarse al tabaco y, al nacer, presentar un síndrome de
abstinencia a la nicotina: llora más de lo normal y se muestra mucho más irritable e
inquieto las primeras semanas de vida. Según un estudio realizado en la Brown Medical School de Nueva
York, los bebés de madres que durante el embarazo fumaron al día seis
cigarrillos muestran en las 48 horas siguientes al parto síntomas
adictivos: están nerviosos, susceptibles, tiemblan y a menudo padecen problemas
intestinales y tienen la presión alta.
Otro
beneficio que tiene dejar de fumar es la prevención de trastornos de
aprendizaje. Diversos estudios han detectado en los hijos de mujeres que
fumaron durante el embarazo más hiperactividad y problemas de concentración.
FUENTE: WWW.SERPADRES.ES
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